EL VIGILANTE DEL FIORDO

Ocho historias memorables que subrayan lo que de dramático y heroico, pero también de miserable, atroz y absurdo, hay en el alma humana. El «vigilante número 155» es un hombre de mediana edad destinado a una inhóspita cabaña solitaria, en las orillas de un fiordo noruego, con la misión de alertar de la presencia de terroristas en la zona, por lo que debe permanecer día y noche ojo avizor. Esa situación de pesadilla, íntimamente relacionada con el enloquecedor sentimiento de culpa que asedia a un funcionario de prisiones, conforma la atmósfera claustrofóbica del relato que da título a este excepcional libro de cuentos. Y algo de esa angustia provocada por el terrorismo se reconoce también en «Chavales con gorra», donde el miedo empuja a un matrimonio a huir de ciudad en ciudad, o, ya en su máxima expresión, en «Carne rota», un mosaico impactante a partir de las vivencias de varios personajes en la tragedia del 11-M. Otras conmociones más íntimas se recrean en la historia del adolescente que descubre la catadura moral de su padre durante unas vacaciones; en el personaje que se encuentra cada día con el dolor de una mujer que llora en una estación de metro, o en el que asiste a su propia muerte.

Fernando Aramburu nació en San Sebastián en 1959. Es licenciado en Filología Hispánica por la Universidad de Zaragoza, participó en San Sebastián, su ciudad natal, en la fundación del Grupo CLOC de Arte y Desarte, que entre 1978 y 1981 editó una revista e intervino en la vida cultural del País Vasco, Navarra y Madrid con propuestas de índole surrealista. Desde 1985 reside en Alemania, donde ha impartido clases de lengua española a descendientes de emigrantes. En 1996 publicó Fuegos con limón, novela basada en sus experiencias juveniles con el Grupo CLOC. Ganó el Premio Tusquets de Novela en 2011 por Años lentos. En 2009 abandonó la docencia para dedicarse exclusivamente a la creación literaria. Colabora con frecuencia en la prensa española. Sus libros han sido traducidos a diversos idiomas y han obtenido varios premios. En 2016 publicó la novela Patria que supuso un éxito de crítica y público y por el que obtuvo en 2017, el Premio de la Crítica, el Premio Nacional de Literatura, y el premio Francisco Umbral al Libro del Año. También ha cultivado el género del aforismo, especialmente en las páginas del diario El País.

Otto storie memorabili che mettono in luce quanto di drammatico ed eroico, ma anche miserabile, atroce e assurdo, c'è nell'animo umano. Il "vigilante numero 155" è un uomo di mezza età assegnato a un'inospitale baita solitaria, sulle rive di un fiordo norvegese, con la missione di segnalare la presenza di terroristi nella zona, su cui deve vigilare giorno e notte. Questa situazione da incubo, intimamente legata al senso di colpa esasperante che affligge un ufficiale carcerario, determina l’atmosfera claustrofobica del racconto che dà il titolo a questa eccezionale raccolta. E parte dell’angoscia causata dal terrorismo si riconosce anche in "Chavales con gorra", in cui la paura spinge una coppia di sposi a fuggire di città in città, o, ancora di più, in "Carne rota", uno sconvolgente mosaico delle esperienze di diversi personaggi dutante gli attentati dell’11 marzo 2004 a Madrid. Altri shock più intimi si sviluppano nella storia di un adolescente che scopre la caratura morale del padre durante una vacanza; nel personaggio che ogni giorno assiste al dolore di una donna che piange in una stazione della metro; o in quello che è testimone della sua stessa morte.

Fernando Aramburu è nato nel 1959 a San Sebastián. È laureato in Filologia ispanica all’Università di Saragozza; ha fatto parte della fondazione del Grupo CLOC de Arte y Desarte di San Sebastián, la sua città natale, che tra il 1978 e il 1981 ha pubblicato una rivista ed ha contribuito alla vita culturale dei Pasi Baschi, della Navarra e di Madrid con proposte di natura surrealista. Dal 1985 risiede in Germania, dove ha insegnato la lingua spagnola ai discendenti degli emigrati. Nel 1996 ha pubblicato Fuegos con limón, romanzo basato sulla sua esperienza giovanile con il Grupo CLOC. Nel 2011 ha vinto il Premio Tusquets de Novela con Años lentos. Nel 2009 ha abbandonato la docenza per dedicarsi esclusivamente alla creazione letteraria. Collabora con frequenza con la stampa spagnola. I suoi libri sono stati tradotti in diverse lingue e hanno ottenuto vari premi. Nel 2016 ha pubblicato il romanzo Patria che ha ricevuto il plauso di critica e pubblico e per la quale ha vinto nel 2017 il Premio de la Crítica, il Premio Nacional de Literatura e il Premio Francisco Umbral come libro dell’anno. Ha anche coltivato il genere dell’aforisma, specialmente sulle pagine del quotidiano El País.