EL CAMINO

Daniel el Mochuelo intuye a sus once años que su camino está en la aldea, junto a sus amigos, sus gentes y sus pájaros. Pero su padre quiere que vaya a la ciudad a estudiar el Bachillerato. A lo largo de la noche que precede a la partida, Daniel, insomne, con un nudo en la garganta, evocará sus correrías con sus amigos ―Roque el Moñigo y Germán el Tiñoso― a través de los campos descubriendo el cielo y la tierra, y revivirá las andanzas de la gente sencilla de la aldea. La simpatía humana con que esa mirada infantil nos introduce en el pueblo, haciéndonos conocer toda una impresionante galería de tipos y la fuerza con que a través de rasgos frecuentemente caricaturescos se nos presentan siempre netos y vivos es uno de los mayores aciertos de esta novela. Feliz evocación de un tiempo cuyo encanto y fascinación advertimos cuando ya se nos ha escapado entre los dedos, El camino es, por su amalgama de nitidez realista, humor sutil, nostalgia contenida e irisación poética no sólo una de las mejores novelas de Miguel Delibes, sino también, como señalaba la crítica, «una de las obras maestras de la narrativa contemporánea».

Miguel Delibes fue un escritor español muy reconocido que nació en el año 1920 en la localidad castellana de Valladolid. Sólidamente formado y con dos carreras a sus espaldas como son las de Derecho y Comercio, Delibes ocupó puestos de importancia en la prensa, llegando a ser director del periódico El Norte de Castilla donde comenzó a publicar. Delibes era un hombre cuyas aficiones eran muy conocidas por todos y entre las que encontramos la caza y el fútbol. La caza sale en muchas de sus novelas, destacando la gran obra Los Santos inocentes, que posteriormente fue llevada de manera excepcional al cine con una gran actuación de Paco Rabal en el papel de Azarías y el fútbol fue motivo de diversos artículos en los que el autor daba forma literaria a las sensaciones que le dejaba el deporte rey. Las distinciones fueron algo muy común para Delibes que fue nombrado miembro de la Real Academia en el año 1973 y que cuenta con infinidad de premios entre los que destacan el Nacional de Literatura, el premio de la Crítica, el Nacional de las Letras, el Príncipe de Asturias o el Cervantes.

Daniel il Gufo, all'età di undici anni, sente che il suo destino è nel villaggio, insieme ai suoi amici, alla sua gente e ai suoi uccelli. Ma suo padre vuole che vada in città a studiare al liceo. Per tutta la notte che precede la partenza, Daniel, insonne, con un nodo alla gola, rievoca le sue scappatelle con i suoi amici --Roque el Moñigo e Germán el Tiñoso - attraverso i campi alla scoperta del cielo e della terra, e rivive le avventure della gente semplice del villaggio. La simpatia umana con cui quello sguardo infantile ci introduce nella città, facendoci conoscere tutta una galleria impressionante di personaggi e la forza con cui, attraverso tratti spesso caricaturali, appaiono sempre puliti e vivi, è uno dei maggiori successi di questo romanzo. Felice evocazione di un tempo di cui notiamo il fascino e l’incanto quando è già scivolato tra le nostre dita, El Camino è, per il suo amalgama di nitidezza realistica, umorismo sottile, nostalgia contenuta, non solo uno dei migliori romanzi di Miguel Delibes, ma anche uno dei capolavori della narrativa contemporanea.

Miguel Delibes nacque nel 1920 nella città castigliana di Valladolid. Solidamente formato e con due carriere alle spalle come Diritto e Commercio, Delibes ha ricoperto incarichi importanti nella stampa, diventando direttore del quotidiano El Norte de Castilla dove ha iniziato a pubblicare. Delibes era un uomo i cui hobby erano ben noti a tutti e tra i quali la caccia e il calcio. La caccia appare in molti dei suoi romanzi, tra i quali il suo capolavoro, Los Santos inocentes, che in seguito fu e portato al cinema con una grande interpretazione di Paco Rabal nel ruolo di Azarías e il calcio è stato oggetto di vari articoli nei quali l'autore ha dato forma letteraria alle sensazioni che il bellissimo sport gli ha lasciato. I riconoscimenti erano qualcosa di molto comune per Delibes, che è stato nominato membro della Royal Academy nel 1973 e ha ricevuto innumerevoli premi, tra cui il Nacional de Literatura, il Nacional de las Letras, il Príncipe de Asturias o il Cervantes.